¿Qué es lo que hace falta para ser felices en el hogar? La verdad es que podríamos hablar de muchísimas cosas en ese sentido. De hecho, lo principal seguramente sea el hecho de que la vivienda sea grande, que disponga de muebles de primera calidad, que esté ubicada en un sitio excelente de la ciudad y este tipo de cosas. Sin embargo, hay que decir que hay otras muchas cosas más de las que no nos podemos olvidar y que son imprescindibles para que nuestro hogar sea el mejor posible en todo momento, pero especialmente durante los meses de frío e invierno que se avecinan.
Y es que cuanto más valoramos el hogar es durante los meses de más frío. Ojo, eso no quiere decir que durante el verano nos deje de importar nuestra casa, pero es verdad que es en invierno, cuando hace más frío y tenemos más necesidad de estar resguardado, cuando más valoramos todo lo que tenga que ver con el hogar. No es para menos. En verano, al fin y al cabo, lo que ocurre es que pasamos más tiempo fuera de casa. Por tanto, nos acercamos a una época del año que es especialmente importante desde el punto de vista del hogar y que a buen seguro nos va a hacer que valoremos como nunca todo lo que tiene que ver con el espacio en el que vivimos.
Vamos a ir viendo qué tipo de cosas necesitamos en el hogar para hacer frente a estos meses que se avecinan de frío. Poned atención, porque cada una de estas cosas hará que vuestro hogar sea más acogedor y tenga todo aquello que necesitéis para vivir felices, que es algo que todos necesitamos y que nos merecemos. ¡Comenzamos!
Calefacción
Es la reina del invierno. Es imprescindible que tengamos en cuenta todo lo que tenga que ver con la climatización del hogar durante los meses en los que, como ocurre en invierno, las temperaturas son extremas. No es nada fácil vivir en una vivienda en la que el frío de la calle se filtra a cada estancia y por ende a nuestros huesos. Como consejo, os podemos recomendar que no dejéis todo lo que tenga que ver con la revisión de vuestra calefacción para cuando empiece a venir el frío y que la intentéis poner cuanto antes para que, si hay algún problema, podáis tener el tiempo suficiente para actuar.
Aislamiento
De nada serviría tener un buen sistema de calefacción sí nuestra vivienda no contara con un sistema de aislamiento que proporcionara la oportunidad de mantener una buena temperatura en el hogar durante buena parte del día, reduciendo la dependencia de esa calefacción que sí que es necesaria en determinados momentos. Además, hablar de aislamiento también tiene mucho que ver con el ruido porque si estamos demasiado expuestos al ruido que hace fuera, en la calle, va a ser imposible que tengamos la oportunidad de vivir con la tranquilidad que nos merecemos. El ruido es una de las cosas más molestas de la vida, especialmente si es intenso, así que hay que poner todos los medios para tratar de evitarlo.
Ropa de cama y de sofá
Uno de los placeres del invierno llega cuando tenemos algo de tiempo libre y lo invertimos en casa. Es en ese momento cuando nos empezamos a dar cuenta de lo que vale disminuir el ritmo de la vida, de lo que merece la pena tomarse las cosas con calma. El hecho de exponernos a ver una película o serie con nuestra familia o de leer un libro en el silencio y la tranquilidad del salón es un verdadero placer, pero presentaría muchos más problemas si tuviéramos que pasar frío mientras estamos realizando actividades como estas. Por eso es importante que contemos con ropa de cama y de sofá. Puede marcar una diferencia brutal entre la comodidad y la inquietud.
Un buen puchero
La alimentación es una de las cosas más básicas de las que tenemos que cuidar en nuestra vida. De ella va a depender en buena medida la salud y el bienestar de la familia. Y es que un puchero es una de las recetas que nos pueden arreglar un frío día de invierno. Nunca es fácil tener que enfrentarse a días como de los que estamos hablando y una ayuda en forma de puchero siempre es interesante porque nos va a permitir obtener esa revitalización que nos ayudará a terminar de afrontar las cosas que tengamos que hacer durante ese día.
A nadie le amarga un buen pijamita
Una de las principales características de la vida en el hogar es que nos permite vestir de una manera tan informal como la que nos haga sentir cómodos. Ese siempre es un plus porque hace que sintamos que todas aquellas cosas que impliquen protocolo o firmeza se queden al margen. Nuestra casa es nuestra casa y debemos ser nosotros y nosotras quienes establezcamos cómo queremos estar en cada momento. Y la ropa es una de las cosas de referencia en ese sentido. El pijama es el mejor testigo de eso sin que nadie tenga ninguna duda al respecto.
No hay sensación mejor para un día de invierno que la que proporciona pasar el día completo en pijama. Es una prenda que se caracteriza porque nos da mucha pereza tenérnosla que quitar cada mañana porque nos hace estar calentitos y sentirnos seguros. Por tanto, siempre que las obligaciones brillan por su ausencia, el pijama es una opción que viene de perlas para mantener la comodidad en el hogar. Los chicos de Newness Kids, una entidad especializada en la venta no solo de pijamas sino también de todo tipo de prendas para niños y niñas, nos han indicado que la tendencia actual de muchos padres y madres es invertir algo más de dinero en pijamas de calidad puesto que los propios niños y niñas son los que primero quieren no quitárselo durante un día de asueto como el sábado o domingo (especialmente este último).
Tú mismo o misma
Hemos mencionado algunas cosas, pero lógicamente hay tantas como cuantas os podáis imaginar. Todo depende de las cosas que os guste hacer y de las ganas que tengáis de hacerlas. Hay un bonito artículo publicado en la página web de La mente es maravillosa que habla de aquellas cosas que hacen que veamos nuestra casa como nuestro hogar y la verdad es que una de ellas es la que tiene que ver con las diferentes versiones de nosotros y nosotras mismas que vemos en esa misma casa. No cabe la menor duda de que hay un factor emocional muy grande a la hora de determinar que esa vivienda sea nuestro hogar y está claro que lo que hemos vivido allí es una de las grandes claves para que eso sea así.
Hay una estadística que viene a poner las cosas claras en relación a la importancia que tiene sentirse cómodo dentro del propio hogar. La encontramos en una noticia publicada en la web de Antico Home y que viene a señalar que el 84% de las personas que son felices en su hogar también lo son en su vida. No es de extrañar en absoluto que sea así puesto que estamos hablando del lugar en el que pasamos más tiempo a lo largo de nuestra vida. Y, por ende, si responde a nuestras necesidades y deseos, es mucho más factible que nuestra vida note su influencia para bien en todos los sentidos. Hay mucha gente que no se toma muy en serio una relación como la que tienen el hogar y la felicidad y sería conveniente que empezáramos a mostrarle la influencia de una sobre la otra. Ese es uno de los objetivos que pretendíamos al escribir este artículo.
Es momento para que todos y todas reflexionemos y respondamos a una pregunta: ¿tenemos todo lo que nos hace felices en nuestro hogar? E incluso podemos hacer alguna otra más: ¿creéis que lo tenéis todo listo de cara a los meses de invierno que están por venir? La verdad es que todavía estáis a tiempo de pulir algunas cosas, pero no tardéis mucho en hacerlo. Más pronto que tarde, os va a apetecer más estar en casa que salir a tomar algo por ahí. Y no os debéis sentir culpables en absoluto de ello. Faltaría más.
El hogar es la pieza fundamental en la vida de las personas. Y le tenemos que proporcionar la importancia que se merece. Si no lo hacemos, tenemos muchas menos opciones de ser felices, de cumplir ese objetivo último que todos y todas tenemos en la vida y que deberíamos perseguir hasta la saciedad. Ojalá que todas las personas tengamos la oportunidad de construir el hogar que merecemos y que lo hagamos de la mano de las personas a quienes nos gustaría tener cerca siempre. De ese modo, sentiremos esa fantástica sensación de que queremos vivir la vida y exprimir cada uno de los segundos que nos regala.
