Hacer turismo es, sin duda, una de las mejores maneras de aprovechar el tiempo de ocio del que disponemos. Ni que decir tiene que se trata de una actividad que es adorada por personas de todas las edades. Los niños y niñas de corta edad disfrutar con la conexión con la naturaleza, a los adultos nos viene bien para desconectar de las largas horas de trabajo y a las personas de mayor edad también les viene bien un cambio de aires de vez en cuando si se encuentran en condiciones de hacer turismo. Por eso nos pasamos la vida recomendándoos que os mováis y que conozcáis nuevas zonas.
Afortunadamente, estamos en un país en el que las posibilidades en lo que al turismo se refieren son prácticamente infinitas. Aunque somos bien conocidos por el buen clima que caracteriza a buena parte de nuestro territorio y la calidad de nuestras playas, lo cierto es que tenemos una oferta que va más allá. Disponemos de un puñado de ciudades históricas a las que es recomendable rendir visita, tenemos un turismo de invierno liderado por muchas y buenas pistas de esquí y, por si todo eso fuera poco, disponemos de uno de los mejores turismos rurales de toda Europa. Ahí es nada.
En los párrafos que siguen os vamos a hablar de un lugar que se ha puesto de moda en lo que tiene que ver precisamente con esa modalidad de turismo, la del turismo rural. Hablamos del valle de Ambroz, en Extremadura, una región olvidada por muchos pero que tiene un encanto que para sí quisieran un montón de regiones ya no solo en el resto de España, sino en toda Europa y el mundo. El valle de Ambroz es una auténtica caja de sorpresas y ese es el motivo por el que merece la pena acudir a él.
¿Qué tiene de especial esta zona? Hemos querido saberlo de la mano de la web Viajar por Extremadura, que indica que la riqueza de la zona se produce por una flora autóctona que es rica y variada y que forma un ecosistema singular. Las plantaciones de cerezos son uno de los mayores reclamos de una zona que, además, tiene un patrimonio histórico y cultural de muchos pero que muchos quilates. Con todos estos datos, no es de extrañar que cada vez sean más quienes intentan organizar una escapada a estas zonas.
En una noticia publicada en la web del diario El País se habla de la magia otoñal del valle de Ambroz. Solo con ver la fotografía que viene ilustrando la noticia, en la que se puede observar el municipio de La Garganta, ya nos podemos hacer una pequeña idea de lo que nos podemos encontrar en un viaje a la zona. Por cierto, la noticia también nos proporciona algunos datos relativos a todo el valle: está compuesto por un total de 230 kilómetros cuadrados y habitado solamente por 13.000 personas. Una densidad de población que desearíamos tener día a día en las grandes ciudades.
En un momento en el que se está poniendo de moda el turismo rural, una de las zonas que vienen experimentando un crecimiento más grande en lo que respecta al nivel de visitantes y, por tanto, de ingresos, es la que se sitúa en pleno valle de Ambroz. Desde Cuatro Esquinas se han encargado de confirmárnoslo, indicándonos que el número de visitantes en este 2021 ha sido incluso superior que el que se registró en el último año normal, el 2019. Eso dice mucho ya no solo de la velocidad a la que se está poniendo de moda la zona, sino también de su encanto y de todas las sorpresas que tiene reservadas para sus visitantes.
Un margen de mejora más que evidente
Todavía no ha tocado techo el valle de Ambroz en lo que respecta a número de visitantes y beneficios de todas las casas rurales que se levantan en la zona. En la región, están convencidos de que el valle se va a convertir en el verdadero rey del turismo rural de todo el país. Y ojo, porque ese es un objetivo bastante ambicioso teniendo en cuenta que el turismo rural en España es uno de los mejores, como hemos dicho, de todo el planeta.
El turismo rural está más de moda que nunca, sin duda, gracias a todos los secretos que guardan lugares como el valle de Ambroz. Ni que decir tiene que potenciar todo lo que tiene que ver con estos lugares no es algo que solo vaya a beneficiar a los empresarios de la zona, sino que nos hace bien a todos los españoles. La imagen del país de cara al extranjero se sigue reforzando de esta manera y eso, en los tiempos convulsos en los que vivimos, es mucho más importante de lo que creemos.